Pero no era nadie
Oí un sonar de aguas
en la oscuridad de la tierra.
Como rallaban sueños
y
corrían gustosas
sobre el hierro y las piedras…
En la oscuridad,
oí un gastarse lento y abundoso.
Pero no era nadie
lavándose las manos.
Veré la luz
Veré la luz y la niebla.
Siempre me abrazarán
sonidos nuevos,
inesperados.
Aquí la luz
es ténue,
esforzada;
a veces
las luciérnagas bailan.
Y juegan a ser
estrellas.
En solitario
No hay riesgos
En la hora develada
Ni en la ortiga
Espigada,
Si
En la piedra fría…
Donde
Acoso tu recuerdo.
Cuerpo a cuerpo.
Parecen
Parecen volver e irse
como en un juego.
Andar
dentro y fuera de Universo.
Parecen góndolas mágicas,
estrellas
viajeras.
Parecen volver e irse,
vomitando fuego,
creando el rito
de las imagenes.
Palpo a tientas,
ciego en la
terrible
oscuridad de las voces.
Que vienen
y van.
Parecen viajeras incansables…